jueves, 24 de marzo de 2016

BOLONIA POR ESTELA (Y VI)




DÍA 7 - PARMA (por la mañana) y regreso (mediodía y tarde).

Día 29 miércoles. Último día en Italia.

Tren: Duración: 1 h 10 min. Coste: ................
¿Qué ver?. Duomo y baptisterio.


                Antes de irnos por la tarde hacemos una visita rápida a Parma, que no pudimos hacer el domingo por la tarde.

                Después de desayunar en el hotel y dejar las maletas en el depósito (no nos cobran, a diferencia de Florencia), cogemos el tren que va a Parma a las nueve menos diez. Llegamos a Parma a las diez de la mañana.

                Inmediatamente vamos a visitar el Duomo y el Baptisterio. No se necesita mapa. La entrada al Duomo es gratuita. Nos gusta bastante, el interior está completamente pintado con frescos. El Baptisterio, de estilo medieval italiano, también está pintado en su interior. Es muy recomendable su visita. Nos cobran 6 e por entrar.

                Posteriormente nos acercamos a la oficina de turismo. Como es habitual en Italia, la información que nos dan es muy escueta. Pasamos por la plaza Garibaldi y volvemos a la estación a coger el tren que sale a las doce nos llevará a Bolonia.

                A Bolonia llegamos a la una y diez de la tarde. Vamos a comer a un restaurante que está enfrente de la estación. Nos cobran 23 € por un plato de spaguetti a la carbonara, un plato de gnocchi con panna (nata) y agua. El coperto es 5 €.

                Ya comidos, regresamos al hotel para recoger y nos dirigimos a coger el autobús que nos llevará al aeropuerto. Los billetes del autobús cuestan 6 € por persona, y se cogen en unas máquinas automáticas que están en la marquesina donde se coge el autobús, justo en la entrada por fuera de la estación central. Hay unas mendigas que te van diciendo cómo sacar el billete (aunque está la máquina en español). Es una lata. Después de coger el autobús y un viaje de 20 minutos, llegamos al aeropuerto. Pasamos los controles de seguridad y esperamos durante hora y media a que salga el avión, a las cinco y cinco de la tarde.

                Finalmente el avión saldrá con un poco de retraso (Ryanair) a las cinco y veinte. Tras un vuelo sin mayores problemas, llegamos Madrid a las siete y veinticinco de la tarde. Después cogemos el metro en el aeropuerto (la entrada está en otra terminal). Después de coger cuatro líneas y un trayecto de 45 minutos llegamos a la estación de Atocha, donde compramos los billetes del AVE (40 e) para el tren que sale a las nueve y media y nos llevará a Zaragoza, donde llegaremos a las once de la noche. Tras dormir en Zaragoza, a las 10 de la mañana del día siguiente cojo el autobús que me llevará a Soria, donde llego a la una menos diez (2h 45 min.). Ya vale, ¿no?.